Si una idea engorda demasiado en la cabeza, no cabe por los brazos, no termina en las manos… las ideas, en su estado previo-imaginativo y elaboradas en exceso, corren el riesgo de caducar. En este artículo recogemos 6 razones por las que pueden peligrar nuestras ideas y 2 reflexiones para recuperarlas y poner en marcha tus ideas de negocio.
Si una idea permanece demasiado en la mente, puede que te ocurra una de estas opciones:
- La idea se vuelve tan compleja que es de difícil ejecución.
- Se materializan en la cabeza tantas ramificaciones de la idea inicial, que resulta difícil converger entre tanta divergencia y todas las opciones se vuelven tan interesantes de realizar… Entre tantas opciones, es difícil elegir sin sentir que se renuncia a algo.
- La satisfacción de la ensoñación sacia las ganas de llevarla a la realidad. La realidad, ciertamente, perfecciona las ideas imperfectas e imperfecciona las perfectas. A veces elaboramos tanto una idea en el plano mental, que no quedan ganas de llevarla a cabo. Porque imaginar, no nos engañemos, también produce placer. Eso sí, ¿subyace en ese placer un miedo a fracasar al ponerse en marcha? ¿Miedo a que la idea pierda su perfección?
- Llega la fecha de caducidad: a veces las ideas tienen su momento y después caducan. O mejor dicho, caduca la motivación, el fuego iniciador que es el que ayuda a dar vida. Se pasa el arrojo. Eso hace pensar que las ideas fáciles de hacer, cuanto antes se hagan, mejor.
- Pasan al contenedor de reciclaje: hay ideas que llegarán meses o años después renovadas, vestidas de otra forma, pero debajo de las cuales está la esencia de una idea abandonada.
- Vuelve a la nube: las ideas vienen de un totum-revolutum de información, inspiraciones, conversaciones, emociones, necesidades propias o ajenas…. Y llegan a nuestra inspiración. Si no se usan, es posible que vuelvan a pasar a esa "wikipedia ideadora" que compartimos entre los seres humanos, y veas el concepto que te inspiró realizado por otras personas. Eso sí, con sus matices. Y es que, como no hay dos personas iguales, tampoco existen maneras idénticas de llevar algo intangible a cabo.
Reflexiones para recuperar y poner en marcha ideas
Al hilo de las posibilidades que hemos comentado anteriormente, me surgen dos reflexiones que debes plantearte para recuperar y poner en marcha ideas para tu negocio:
- Readapta tu idea cuando sea necesario, cuando exista una crisis o necesites reconectar con la motivación inicial. La mayoría de las ideas tienen mil y una maneras de ser ejecutadas.
- Lo importante de una idea es el motivo por el que surgió en nuestra cabeza y analizar el motivo por el que no queremos abandonarla.
Al fin y al cabo, la imperfección realizada es más interesante que la perfección idealizada. Por un lado, porque la perfección ya sabemos que no existe. Y, por otro lado, porque la imperfección es menos aburrida y genera energía suficiente para dar cabida a más ideas interesantes.
Autora: Miren Lauzirika