Iratxe López es socia de EmakumeEkin y hemos conversado sobre su proyecto, motivaciones, referentes…y más.
Cuéntanos brevemente a qué se dedica tu empresa
Iratxe López Psicología es un centro de psicología que he creado con mucho mimo y dedicación. En él llevamos a cabo terapia psicológica. Ayudamos a niños/as, adolescentes, personas adultas y parejas a transitar sus dificultades. Además, en el centro tengo la suerte de trabajar con dos psicólogas maravillosas. Las tres compartimos espacio y experiencias.
¿Qué te motivó a dar el paso?
Creo que el emprendimiento lo llevo dentro. Me apasiona la psicología y también el emprendimiento en sí. Así que uní ambas cosas y nació Iratxe López Psicología.
Estuve trabajando en el ámbito universitario, pero nunca terminé de estar a gusto del todo. Me gusta la docencia, pero yo necesitaba algo más. Cuando estuve preparada, di el paso a la psicología clínica y empecé a ver pacientes. Después de mi primer día de trabajo como psicóloga clínica, supe que estaba en el lugar adecuado. ¡Había encontrado el trabajo al que quería dedicarme! Sin embargo, las condiciones laborales de los trabajos no eran de mi agrado, por ello decidí emprender y montar mi propio centro de Psicología.
En realidad, no di el “gran paso” de emprender, sino que fui dando pasitos pequeños. Primero alquilaba un despacho por horas, más adelante alquilé un despacho minúsculo solo para mí y finalmente, alquilé un espacio más grande con varios despachos. Fueron muchos pasos pequeños que se convirtieron en un gran camino.
¿Qué personas te sirvieron de referente para dar el paso?
La verdad es que esta respuesta la tengo clara, mi referente ha sido mi madre. Ella también emprendió. Cuando mi hermano y yo nos hicimos mayores, ella decidió emprender y montar un negocio. Concretamente, una librería en el barrio en el que vivíamos. Pude ver cómo pasaba miedos e incertidumbres, pero el negocio arrancó y tuvo éxito. Además, se ha cambiado varias veces de lugar buscando nuevas oportunidades. En este sentido, me he sentido muy afortunada de tenerla a ella como referente. Estoy segura de que sin este referente me hubiese costado más emprender.
¿Nos cuentas un obstáculo y una oportunidad que hayas superado en este proceso?
Para mí emprender no ha sido un proceso excesivamente duro. Soy consciente de que muchas personas que emprenden atraviesan momentos difíciles. No obstante, en mi caso tengo que decir que fue un camino agradable sin muchos obstáculos. Aunque, evidentemente, he trabajado mucho y he tomado buenas decisiones.
En lo que respecta a las oportunidades, creo que he tenido muchas y que las he sabido aprovechar. Desde luego, que trabajar con mis compañeras psicólogas en el centro es una gran oportunidad que me permite aprender y mejorar cada día.
¿Qué nos puedes contar de tus próximos proyectos?
En estos momentos no tengo grandes proyectos, más allá de disfrutar de lo que he conseguido y de mi trabajo. En el ámbito profesional, por el momento, me siento satisfecha y me apetece tomármelo con calma y disfrutar del viaje. Una vez dicho esto, es cierto que tengo algunos pequeños objetivos como, por ejemplo, trabajar mi marca personal, formarme en terapia feminista e incorporar a una nueva psicóloga al centro.
¿De qué te sientes más orgullosa?
En todo este proyecto de emprender, por desgracia, he escuchado muchos mensajes desmotivadores: la cosa está muy difícil, conseguir pacientes es imposible, mira esta otra psicóloga que lo intentó y fracasó, el trabajo en la universidad es más seguro… Me siento muy orgullosa de no haber dado demasiada importancia a estos mensajes. También me enorgullece el haber confiado en mis capacidades e intuición para seguir adelante con mi proyecto.
